Hace tiempo que no me ha dado por escribir nada, demasiado. Nisiquiera se si terminaré y/o publicaré esto. Solo sé que lo necesito, me dan igual errores gramaticales, sintácticos u ortográficos, simplemente quiero sentirme en paz.
El día de hoy, ha sido raro, aunque esta rareza se ha vuelto habitual en las últimas semanas. Quizás sea un error llamarlo rareza, debería ser altibajos, "subidas y bajadas" como diría un gran amigo.
Agobios, cambios de humor, probablemente típicos de un periodo menstrual que toca a su fin y noticias malas, noticias buenas y momentos filósoficos en los que te cuestionas la vida y la realidad mucho más que cualquiera de esos que estudiaste en segundo de bachillerato.
Supongo que no soy la única que se ha cuestionado más de una vez que va a hacer de aquí a unos años, para qué sirve lo que hace o qué camino debe tomar. Y creo, sinceramente, que solo tenemos que dejarnos llevar, sin relajarnos, pero sin agobios.
Hoy he tenido el placer de tener decenas de conversaciones, vía online y en persona, que me han hecho alegrarme, entristecerme, ilusionarme, decepcionarme....
Lo único que quería decir hoy es que a 8 días de mi cumpleaños, creo que ya tengo el regalo que quiero. Gente que me quiere, gente con la que hablar, con la que sentirse bien, gente de cafés o gente para toda la vida, pareja, familia, amigos, compañeros, gente, gente en general que hace tu vida más alegre, que hace tu vida tal y como es.
Simplemente quiero dar las gracias a esa gente, que con mis gustos, mi acento, mi raro y demasiado alto timbre y tono de voz, mi insistencia, mis lloriqueos, mi impaciencia, mi creatividad y mi poca fuerza de voluntad, están conmigo, elija el camino que elija.
No hay comentarios:
Publicar un comentario